Dietas alternativas

Buenos días a todos lo que me estáis leyendo ahora mismo. Si me conoces sabrás que hace unos meses me hice vegetariana.  Esto despertó mi curiosidad por descubrir otras dietas a las que estamos todos acostumbrados. Siempre he tenido una dieta mediterránea, he comido carne y no he tenido mucha cuenta el origen de los alimentos que comía. Sin embargo, hay muchas dietas alternativas a la comida “normal”. Hoy os aclaro algunas de esas dietas.

Dieta ovo-lácteo-vegetariana: Dieta que rechaza el consumo alimenticio de cualquier animal, es decir no comen ni carne ni pescado, básicamente por estar en contra del maltrato animal. Aunque en algunos casos se produce como método para “adelgazar” o por beneficios para el organismo. Sí consumen alimentos derivados de animales como la leche, huevos, miel o el queso, pero generalmente de origen ecológico que no trata a los animales como productos de consumo. 



De esta dieta se derivan los ovo-vegetarianos, que no consumen leche ni queso, pero sí huevos; los lacto-vegetarianos no comen huevos, pero sí lácteos; y por último los pescetarianos que añaden a su dieta pescado.

El vegetariano estricto o el vegano, no se alimenta de carnes, ni pescados, ni de ningún alimento de procedencia animal o en la que un animal haya sido maltratado. Esto incluye el aceite de palma la gelatina, y alimentos que contengan algún porcentaje de lácteos o trazas de restos animales.




Dieta crudivegana (raw vegan): Alimentación en la que se consume alimentos al natural. Se basan en la creencia de comer alimentos que son diseñados para el ser humano, tal y como nos los da la naturaleza, sin aditivos, ecológicos y solo cocinados a una temperatura inferior a 40º. Esto incluye verduras, frutas, legumbres, raíces, hortalizas, algas, germinados, raíces y frutos secos.  Se puede consumir alimentos cocinados mientras no superen el 30% de la dieta, o como modo de transición.


Dieta macrobiótica: Nace de la filosofía oriental y con el objetivo de alcanzar la armonía entre cuerpo, alimentos y emociones. Pretende liberarnos de hábitos de consumo que nos llevan a una mala alimentación. Esto se consigue comprando alimentos que se cultiven próximos  a ti, de temporada y que estén lo menos manipulados posible. Además, una de las ideas principales de este modo de vida es la distinción entre los alimentos yin y los alimentos yan, y la energía que estos nos aportan.No acepta el consumo de alcohol, se debe consumir agua previamente hervida, comer tan solo cuando se tiene hambre, masticando concienzudamente; pero, a diferencia de las anteriores dietas, la macrobiótica sí acepta comer animales siempre y cuando vengan de un lugar próximo a nosotros. Por ejemplo, si vas a pescar al mar tú mismo o alguien que conozcas, y lo cocinas en tu casa. Por eso el problema de este tipo de alimentación estaría en encontrar los alimentos adecuados o en el elevado precio de estos.






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